La generación con sentimiento de culpabilidad
De pequeños nos contaron que en la vida lo más importante para tener un buen futuro y vivir bien era estudiar y esforzarse mucho. Pasaban los años y esa recomendación de nuestros mayores (abuelos, padres, tíos…) se mantenía inmutable «si estudias te irán muy bien las cosas en la vida». Muchos de nuestros familiares no tuvieron la posibilidad de aprender y veían en la educación el pasaporte a una vida mejor que ellos no tuvieron.